+++ Se trata de una especie de mamífero carnívoro de la familia de los prociónidos, también conocido como martucha, perro de monte o cuchumbí.
Acayucan, Veracruz.- Grande fue la sorpresa de habitantes del municipio de Acayucan, al sur de Veracruz, al encontrar sin vida a un pequeño animalito de color café tirado con características de un mono, sin signos vitales cerca de una banqueta.
De acuerdo con colonos, el hallazgo del animal ocurrió durante la madrugada de este lunes 11 de marzo, sobre la calle Juan de la Luz Enríquez, cerca de la unidad médica del Seguro Social.
Datos obtenidos, indican que se trata de un ejemplar de la especie kinkajú (Potos flavus) o también conocida como Martucha, perro de monte, el cual presentaba una fractura expuesta a la altura de su pata derecha, además, de diversas heridas abiertas que ya se encontraban totalmente infectadas.
Aunque transeúntes quisieron auxiliar al pequeño animal, confirmaron que lamentablemente ya había fallecido.
El médico veterinario, Hansel Gómez, explicó que posiblemente el kinkajú, pudo estar en cautiverio por mucho tiempo y en pésimas condiciones, por lo que se infiere que el animal habría escapado y al estar muy débil, cayó de algún árbol y provocó la fractura y su posterior muerte.
Según datos de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, la especie kinkajú (Potos flavus) o también conocida como martucha, perro de monte, se encuentra protegida bajo el rango de la norma oficial NOM 059 SEMARNAT 2018.
¿Dónde vive este curioso animal?
Los kinkajús viven en las selvas tropicales de Centroamérica y América del Sur, En nuestro país, el Kinkajú se puede encontrar en los estados de: Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Veracruz, Yucatán, Michoacán, San Luis Potosí y Tamaulipas, según datos de Naturalista MX y Zoológico y Safari de Guadalajara.
Estos ejemplares pueden poner sus pies al revés y correr fácilmente en cualquier dirección sobre las ramas o subir y bajar por los troncos de los árboles. Tienen una cola prensil que utilizan como si fuera otro brazo. A menudo se cuelgan de ella, que también les ayuda a balancearse y les sirve de cómoda manta cuando duermen en la canopea de los bosques.